Creo que una de las decisiones más difíciles que he tomado en mi vida ha sido terminar con mi novio. Sé que sueno como una adolescente pero es lo que siento. Los primeros días no lo había asimilado bien así que no le prestaba atención pero al pasar los días me he dado cuenta del vacío.
Han sido siete años llenos de momentos maravillosos y otros no tanto, alegrías, tristezas, peleas, reconciliaciones y muchas cosas más. Aunque nos queríamos (queremos) mucho, nos empezamos a llevar mál y por más que intentamos me cansé y tuve que decir basta. Es chimbo porque siento que abandoné todo y que a lo mejor podía hacer más, pero no sé, las cosas pasan por algo y bueno como dicen: "pa lante es pa allá" hay que seguir.
Es justo en este momento en que le doy gracias a la vida por tener amigos maravillosos que me han ayudado tanto y han tenido que soportar mi guayabo.
Seguramente escribiré por aquí como me siento y sonaré a doña divorciada, pero creo que este es un buen espacio para hacer catarsis y si ofendo a alguien de antemano me disculpo, pero no se preocupen no solo hablaré de mi despecho, sino también de otras cosas, porque como me dijo una amiga, poco a poco iré superando este asunto.
Pd: espero pasar rápido este despecho, porque realmente me desagrada la Violeta emo! jajajajajaja